1. INTRODUCCIÓN
A lo largo de mis años de formación, tanto en el instituto, como en el técnico Superior de Integración Social, y, por último, en el Grado de Psicología, he tenido la oportunidad de realizar diferentes prácticas, talleres y proyectos, que me han permitido ser consciente de la necesidad de trabajar con aquellos niños que presentan problemas de conducta en los centros educativos. Estos problemas de conductas dificultan la convivencia escolar en el centro, siendo perjudicial tanto para el alumno en cuestión, como para el resto de compañeros. Por ello, sería adecuado realizar actividades de reflexión, de reconocimiento de responsabilidad, talleres, convivencias… con el menor, que le ayude a recapacitar y a generar un cambio cognitivo-conductual. Considero que expulsar a un niño de las clases o del centro sin ofrecerle una alternativa educativa con la que pueda aprender a mejorar su comportamiento no es la solución más adecuada, ya que, no se genera un aprendizaje. Por ello, a continuación, se presenta un “planteamiento” de proyecto cuyo objetivo es dar respuesta a estas necesidades.
2. JUSTIFICACIÓN
Este proyecto se plantea como una alternativa socioeducativa para dar respuesta a las necesidades que presentan los menores que son expulsados del centro, así como, aquellos que presentan problemas de conducta en el mismo.
A través de este programa los menores recibirán una atención directa, promoviendo el cambio cognitivo-conductual, modificando así comportamientos y actitudes de tipo disruptivas. Se trabajará el fomento de las habilidades sociales de los mismos (valores, reglas, comunicación asertiva, respeto, responsabilidad…) y se les ayudará a continuar con sus trabajos escolares, mejorando, de esta forma, la convivencia escolar.
Los factores etiológicos que suelen generar este tipo de comportamientos son frecuentemente problemas emocionales iniciados en el entorno familiar y social del menor, los cuales son trasladados al aula por el mismo; generando conflictos entre el profesorado y el alumnado, boicots de las clases, “llamadas de atención” hacia el docente o los compañeros, impidiendo así el proceso de aprendizaje.
Son muchas las conductas y comportamiento disruptivos que se pueden dar en el aula y que interfieren en el clima escolar, como, por ejemplo, la intimidación, el bullying, el racismo, la violencia o los daños materiales. A causa de todos estos comportamientos la disrupción en las aulas supone una preocupación social y, por tanto, la respuesta a estas situaciones debe de ser inmediata. Es por ello la necesidad de un programa de estas características, para dar una respuesta rápida y eficaz a estos comportamientos, ya que, si no se interviene ante estas situaciones, la continuidad y/o reiteración de estas conductas tendrán consecuencia a corto, medio y largo plazo.
3. OBJETIVOS
El objetivo principal del programa es prevenir, controlar y supervisar los problemas de conducta y convivencia que se desarrollan en el centro, ejecutando medidas preventivas y de intervención que favorezcan el cambio cognitivo-conductual del menor y, por consiguiente, la mejora del clima escolar y social.
Además de este objetivo principal, a través de la realización de este proyecto podemos lograr muchos otros como:
– Detectar las problemáticas sociales para buscar las soluciones más adecuadas en cada caso.
– Mejorar el clima del aula, dando lugar a un buen desarrollo del proceso enseñanza-aprendizaje.
– Ofrecer apoyo socio-educativo a los menores con falta de motivación escolar y de autoestima.
– Promover la participación de las familias en sesiones informativas tutorizadas individuales y/o grupales.
– Fomentar en la familia el desarrollo de habilidades que contribuyan a una mejora del clima familiar.
– Prevenir y/o disminuir el absentismo y el abandono escolar.
– Facilitar el fomento de una comunicación asertiva familia-escuela.
– Reducir el número de menores con riesgo de inadaptación escolar.
4. UBICACIÓN
Para llevar a cabo el programa seria necesario un aula de tamaño similar a la de los centros educativos, cuya localización se encuentre fuera de los mismos.
Como propuesta principal, podría ser un aula de la casa de la juventud, ya que el entorno en el que se encuentra posibilita la realización de diferentes actividades. Otras propuestas podrían ser un aula de la casa de la cultura o de la chanca.
5. BENFICIARIOS
Alumnado menor de 16 años matriculados en los IES de la localidad que presenten problemas de convivencia, así como las familias de los mismos.
6. TEMPORALIZACIÓN
Desde el 1 de octubre hasta la finalización del curso escolar. Las actividades serán desarrolladas en horario de mañana, de lunes a viernes.
7. RECURSOS HUMANOS, MATERIALES Y ECONÓMICOS.
Para la realización del proyecto será necesario la contratación de un psicólogo/a (Unas 30 horas semanales)
En cuanto a los materiales, será necesario un determinado presupuesto para los recursos necesarios, como pueden ser: fotocopias, materiales de papelería (cartulinas, bolígrafos, folios, cinta adhesiva…), una correcta adecuación del aula (proyector, pizarra, sillas, mesas…), entre otros.
A modo de conclusión cabe destacar que esto es un “planteamiento” del proyecto, por tanto, el desarrollo del mismo abarcaría más puntos, entre ellos: la metodología a seguir (teniendo en cuenta las características psico-evolutivas y sociales del alumnado a atender, y siendo este el protagonista del proceso de cambio y de enseñanza-aprendizaje), las actividades a realizar, el protocolo de actuación a llevar a cabo, la evaluación del mismo, las propuestas de mejoras tras la finalización o los diferentes anexos.